La entrada de agua en una propiedad puede ser muy destructiva. Con el tiempo, el exceso de humedad puede causar problemas dentro de un ambiente interior. Sin una adecuada extracción de agua, descontaminación y secado, numerosos efectos a largo plazo podrían impregnarse en un inmueble y provocar daños estructurales duraderos, además de plantear muchos riesgos para la salud.
Cualquier tipo de entrada de agua debe tomarse en serio, y la restauración adecuada de los daños causados por el agua es una parte fundamental de la recuperación de su hogar u oficina en caso de haberse visto afectada.
Tanto si corresponde a una tubería rota, daños por inundación u otras numerosas posibles causas, se requiere una mitigación rápida y eficaz de los daños causados por el agua. La mitigación de los daños por agua es mucho más que secar y limpiar una propiedad; hay muchos otros factores que deben considerarse, como la descontaminación y el tratamiento de los materiales porosos (por ejemplo, alfombras o yesos) que pueden retener agua.
La restauración de daños por agua debe llevarse a cabo de la manera más rápida y eficiente posible después de cualquier tipo de entrada de agua. En simples palabras, la mitigación de los daños por agua es disminuir el impacto de un evento adverso reduciendo los posibles daños causados por el agua tras una filtración o inundación.
